Según ha informado la NASA, nos encontramos atravesando un mínimo solar, posiblemente histórico. Un gran evento, sin precedente. Todas las manchas solares han desaparecido y la actividad solar es prácticamente nula.
En el año 2008, durante el 78% del tiempo, el sol no tuvo ninguna actividad. En el año 2009, las manchas solares incluso son menos frecuentes, aumentando a un 87%.
Nos encontramos atravesando un período de 25 días seguidos, sin interrupción, sin manchas solares a la vista.
En el año 2008 no se observaron manchas solares en 266 días de 366. Para finales del mes de marzo de 2009, no se habían registrado manchas solares en 78 días de los 90 días transcurridos.
Un mínimo solar similar tuvo lugar a finales del siglo 19 y del siglo 20 aunque, en cada ocasión, el sol se recuperó con un máximo solar potente.Algo que probablemente podría tener lugar en este caso, aunque nadie puede confirmar que así vaya a suceder. Se trata del primer mínimo solar y el primero disponiendo de una tecnología moderna.
En el año 2008 no se observaron manchas solares en 266 días de 366. Para finales del mes de marzo de 2009, no se habían registrado manchas solares en 78 días de los 90 días transcurridos.
Un mínimo solar similar tuvo lugar a finales del siglo 19 y del siglo 20 aunque, en cada ocasión, el sol se recuperó con un máximo solar potente.Algo que probablemente podría tener lugar en este caso, aunque nadie puede confirmar que así vaya a suceder. Se trata del primer mínimo solar y el primero disponiendo de una tecnología moderna.
Los científicos desconocen si será como los que han tenido lugar en el pasado o si tendrá sus propias características.
Los mínimos solares suelen tener lugar cada 11 años. Forma parte del ciclo natural del sol, descubierto por el astrónomo alemán Heinrich Schwabe a mediados del año 1800. Sin embargo, la pregunta es si realmente tiene que estar tan en calma como ahora.
Según las mediciones realizadas por la nave espacial Ulises, desde mediados de los 90, se ha detectado una disminución de un 20% en la presión del viento solar. El viento solar mantiene los rayos cósmicos galácticos fuera de nuestro sistema solar interior. Con un viento solar menor, los rayos cósmicos penetran, aumentando el riesgo para la salud de los astronautas. Además, un viento solar menor también genera menos tormentas geomagnéticas y auroras en la Tierra.
A pesar de la tecnología moderna de la que disponemos ahora, no se puede predecir lo que vendrá a continuación, por lo que no se sabe cómo de intenso será el próximo máximo solar. Sin embargo, se calcula que tendrá lugar entre el 2012 y el 2013.
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